Edificio El Olivillo. Instituto de Higiene

Situado en el borde del casco urbano hacia el Campo de las Balas, el edificio es un interesante ejercicio expresionista que resuelve con una planta en W la necesaria vocación funcional del mismo, su relación con el cercano océano y su carácter de borde murado.

Las pérgolas, los ojos de buey, etc., de este edificio rememoran el repertorio de Sánchez Esteve, que optó por una imagen blanca, alejada del hormigón visto. El edificio sufrió más tarde algunas modificaciones, como el cierre de las terrazas, aproximándose a la imagen de los cuerpos cilíndricos con cinco huecos tan característicos del autor (Edificio Transmediterránea o Almacenes Hermu). Esta obra parte de la base de un proyecto de viviendas promovido por el ayuntamiento gaditano. Posteriormente Sánchez Esteve modifica las plantas para insertar los usos sanitarios. Resulta curioso cómo aprovecha íntegramente los alzados y perspectivas del primitivo proyecto de viviendas, teniendo así la oportunidad de firmar en solitario el hermoso y expresionista edificio que había prefigurado años atrás con Rafael Hidalgo.

Con este edificio el arquitecto prosigue su acción recualificadora del centro histórico, construyendo la periferia interior. La forma cóncava de la planta configura y abraza el espacio para reforzar la imagen de glorieta y dar unidad a la confluencia en ángulo agudo de las calles adyacentes. 
Natividad Beltrán Rodríguez-Rubio y José Ignacio Gómez Gómez