Memoria
Siguiendo el modo de hacer característico de Coello, el edificio está resuelto en dos bloques: un cuerpo bajo, extenso en planta, que sirve de zócalo a una pastilla vertical, que asume la parte específica del programa residencial.
El cuerpo bajo reúne los espacios comunes, incluida la capilla, organizados en torno a dos patios acristalados unidos por un corredor. Ricos en vegetación, los patios hacen de los desplazamientos por esa planta baja en un gratísimo paseo. El prisma vertical, estrecho y alargado, contiene las habitaciones, mínimas en superficie y mobiliario, alineadas una junto a otra a un único lado del corredor longitudinal, En sus extremos se disponen los servicios, mientras que el núcleo principal de escaleras y el ascensor se sitúan en el centro. De ese modo todas las habitaciones gozaban de las vistas hacia el paisaje lejano de la Sierra del Perdón, al sur, ahora impedidas por une edificación poco afortunada.
Las habitaciones son de gran sobriedad. Tienen una ducha cada dos habitaciones con un ingenioso sistema de puertas, una mesa escritorio incorporada en la ventana con un radiador oculto y carpinterías con un paño interior, de modo que el cabezal de la ventana sirve de protección frente al excesivo soleamiento.
La sencillez del esquema y la repetición de los elementos propician la fuerza que posee la apariencia exterior, con grietas profundas, ‘talladas’ longitudinalmente en la continuidad uniforme de la fachada de ladrillo.
En el extremo oeste del edificio se sitúa la capilla, algo diferente a otras del mismo autor que, contra su costumbre, recurre a una geometría algo compleja, ya que debía servir tanto como para la comunidad como para el publico, con acceso independiente. El resultado es espacialmente algo confuso; en planta resulta una disposición en ele, con dos brazos desiguales, uno rectangular y el otro trapezoidal que comparten un solo altar. Con todo, cada una de las dos capillas, considerada de forma independiente, tiene interés como también lo tienen los detalles y diseños vidrieras, pilas de agua, altar, mobiliario, etc.
En su momento esta obra representó un modo nuevo, luminoso y abierto, de entender este tipo de edificios, al romper con la tradición conventual, de una arquitectura sumida en sombras y con techos altos y solemnes.
José Manuel Pozo
Uso original: Uso religiosoCentro religiosoUso residencialResidencia
Reportaje fotográfico:
Categoría: Nivel A
Registro: Ampliación temporal, 1965-1975