Resumen
La arquitectura de Pedro Ispizua Susunaga.1920-1965 Pedro Ispizua Susunaga, arquitecto que ejerció su labor en el entorno de Bilbao entre 1920 y 1965, ha pasado a la historia de la arquitectura española contemporánea por sus brillantes aproximaciones al racionalismo durante la década de los años 30, piezas aisladas dentro de una trayectoria ecléctica que sólo se conoce parcialmente. Generacionalmente se le sitúa entre los representantes regionales de la generación del 25, pero el valor de su trayectoria no se limita al valor de estas aproximaciones puntuales al racionalismo. Influido por su formación artesanal, con un temperamento impulsivo y extremadamente dotado para el dibujo, recibió su formación como arquitecto en la escuela de Barcelona bajo la docencia de Luis Doménech, del que fue alumno predilecto. A lo largo de una dilatada trayectoria de carácter autodidacta, Ispizua desarrolló una arquitectura ecléctica altamente experimental, extremadamente versátil en el empleo del lenguaje, dotada de un elevado tono monumental, y caracterizada por la paradójica simultaneidad de la tendencia a la esencialización formal y a la exuberancia, aspectos que se materializan elocuentemente en sus episodios Art Decó, uno de sus mejores momentos. Arquitecto municipal de Bilbao durante dos décadas, y solicitado por una carga de trabajo desbordante, proyectó y construyó numerosos edificios públicos y edificaciones residenciales que constituyen piezas insustituibles de la fisonomía urbana del Bilbao actual. El estudio de su trayectoria alumbra un recorrido repleto de pasajes sorprendentes, que hace de él una suerte de icono de un momento concreto de la historia reciente de la cultura arquitectónica española, y uno de los más claros exponentes del eclecticismo exhuberante de la arquitectura bilbaína del siglo pasado entre 1920 y la década de los 50.
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