Denominación actual:
Autoria: Gabinete de proyectos y diseños de la CUF
Colaboradores y detalle autoría:
Memoria
Ubicada en Barreiro desde 1907, la Companhia União Fabril representa en Portugal el espíritu pionero y el gigantismo dentro de las industrias químicas nacionales, habiendo creado la sinergia necesaria para el desarrollo de fábricas similares. Aprovechando el cambio productivo dentro de la agricultura y sectores como el alimentario, el de los productos de higiene, el de textiles sintéticos, las refinerías, etc., la CUF consolidó la organización vertical de la industria química no sólo en diversas ubicaciones dentro del país, sino también en Barreiro. Un emplazamiento que se había dedicado tradicionalmente a la industria pesquera, asistió en menos de un siglo a una transformación territorial y paisajística relacionadas con la tipología industrial desarrollada. Mediante el aprovechamiento de los elementos de comunicación ya existentes –la estación de ferrocarril del sur-sureste y el río Tajo– la CUF consolido la identidad del emplazamiento, al que se trasladaron millares de personas.
Dentro de la multiplicidad constructiva y formal, de carácter social y productivo, destacan las dos estructuras de almacenamiento, debido a la utilización de técnicas constructivas capaces de desarrollar y consolidar innovaciones en otras opciones programáticas coetáneas. Los silos para productos químicos, cuyo proyecto dependía de los ingenieros y que respondían a premisas exclusivamente funcionales, se caracterizan por sus volúmenes horizontales, cerrados y alargados, indicio de su función. El silo del sulfato de amonio (1952) se integra dentro del complejo compuesto por el propio edificio de producción y por el volumen esférico para el almacenamiento del amonio. De este trío, se impone el silo, por su gran tamaño y por su sentido estético, que queda patente en la profusión y constancia rítmica de las nervaduras externas que constituyen los elementos estructurales de hormigón armado y que hacen posible la construcción de este volumen semicircular.
El silo de azufre (1960), de menor tamaño, destaca por su volumetría parabólica, sólo posible mediante la utilización de estructuras de hormigón armado, bien visibles en su interior.
El hormigón es utilizado de tal manera que su potencialidad se desarrolla al máximo; forma y función se unen consiguiendo soluciones de construcción económicas que explotan de manera inequívoca las ventajas plásticas de este material.
Deolinda Folgado
Uso original: Uso industrialIndustria
Reportaje fotográfico:
Categoría: Nivel A
Registro: La arquitectura de la industria