Torres de viviendas en la calle del General Silva Freire

En este conjunto de hileras y franjas definidas previamente en el Plan de Olivais Norte, los autores perseguían la utopía de crear un espacio común de convivencia capaz de dignificar la vivienda social.

En las torres, el cuerpo que comprende el vestíbulo de entrada y distribuidor de los accesos verticales funciona como una bisagra de la composición, y está tratado con una amplitud y calidad espacial inusitadas que le confieren no sólo la función de «paso», sino de «estar». Estas intenciones se confirman en la generosa superficie, la ventana con vistas, la introducción de un banco como mobiliario fijo — que se repetirá en todas las plantas —, el pavimento de calzada «a la portuguesa» modernizada, o en el panel de hormigón moldeado concebido por diversos artistas, que añade un valor especial a las distintas entradas de cada planta. La preocupación por el espacio común se extiende hasta el coronamiento del edificio, con un ático donde están ubicados los tendederos y los trasteros. En las hileras, el reflejo de este concepto se manifiesta en los satélites que sobresalen del edificio y que funcionan como cobertizo cubierto, y también como banco y panel de azulejos. La opción deliberada por el hormigón armado visto con el diseño geométrico de Nuno Portas, o la intervención de varios artistas plásticos, fueron otras de las innovaciones que sin duda contribuyeron a la concesión por primera vez del premio Valmor a un programa de vivienda social.
Ana Tostões