Hotel Alga

Joan Maria de Ribot i de Balle ejerció de alcalde de la ciudad de Girona en 1957, coincidiendo con el proceso de construcción del Hotel Alga. El hotel se ha colocado en la parte más alta del terreno, generando un límite entre el aparcamiento y el jardín del hotel. Este planteamiento ha provocado que el edificio sea más bien alargado y se han tenido que introducir una serie de quiebros estratégicos en planta para evitar que los recorridos sean demasiado largos. La edificación está orientada hacia el sur, de cara al mar, y se ha creado una constante contraposición de espacios abiertos y cerrados para poder escoger entre las numerosas situaciones de ocio y descanso que se producen en un hotel.

El conjunto se compone de dos plantas sótano, una planta baja abierta al jardín y dos plantas piso, con los dormitorios distribuidos a ambos lados de un pasillo central. Se combinan elementos de tecnología avanzada con acabados autóctonos. Las habitaciones orientadas a sur disponen de grandes terrazas que también sirven de protección solar, algunas de las cuales están reforzadas con brise soleil verticales. Cabe destacar la singularidad formal y constructiva de la pérgola de hormigón armado del comedor al aire libre.
Xavier Llobet i Ribeiro