Edificio de viviendas El Serrucho

El edificio, situado en la conjunción de las calles Cervantes y Matemático Pedrayes, consta de planta baja y siete plantas piso, la última de ellas, retirada del plano principal de la fachada. Su composición se basa en un ritmo constante de planos verticales que soportan unos balcones abiertos en ángulo con la calle, ajenos a su alineación. Esto genera una composición de líneas rectas de gran limpieza y claridad conceptual, que otorgan potencia y expresividad al conjunto. El proyecto se basa en una modulación precisa que origina una imagen de conjunto simple, ordenada, limpia y de una gran potencia. Cabe destacar la adecuada elección del material de la fachada ya que, debido a su tamaño y puesta en obra, permite que los grandes paños ciegos parezcan estar hechos de una sola pieza, sin juntas.

La obra hace gala de una enorme modernidad para la época, ya que prescinde de la alineación de las calles para buscar la orientación y las vistas correctas. El conjunto se organiza mediante unos planos ciegos de gran escala que ordenan y dan ritmo a la fachada, complementados por elementos de menor escala en forma de ventanas y balcones. Estos se tratan con gran sutileza; ciegos en uno de sus costados, cierran el frente con barandillas metálicas. Este matiz, aparentemente simple, dota al conjunto de una gran diversidad en las fachadas, ya que cambian según la perspectiva del espectador.

Se usan conceptos compositivos tan clásicos como el ritmo, la repetición, la modulación y la escala de los elementos, pero desde un punto de vista moderno, que evita la ornamentación superflua y se basa en criterios racionales, como la búsqueda de la mejor orientación en cada caso particular. Resuelve las entregas magistralmente, con planos compositivos que se distinguen por su color, y que son tangentes y pasantes, dando la impresión de estar recogidos los unos por los otros.
Alfonso Moral López