Edificio de viviendas para Comercial Inmobiliaria

Este edificio se encuentra en un solar irregular muy complicado y con dos fachadas. El programa requería la construcción de seis viviendas de lujo, que se resolvieron de forma laberíntica y perfecta. La disposición permitía introducir cuatro viviendas de lujo en sólo 40 m de fachada a la calle Almagro, con una docena de amplias estancias principales abiertas hacia el exterior y hacia una terraza reducida dimensión. Además de los dormitorios y de las zonas de servicio, cada una de ellas cuenta con salón, comedor y cuarto de estar; este último está retranqueado para dar lugar a una amplia terraza jardín, utilizada por primera vez en Madrid, aunque intuida por Gutiérrez Soto en el proyecto de la calle Espronceda. La distribución situaba en estas crujías a fachada los usos representativos, con la escalera y ascensor principales, largos pasillos con los dormitorios y baños en la parte intermedia y, al final, las zonas de servicio cocinas, servidumbre y otro grupo de comunicación vertical , rodeando tres amplios patios y cuatro más pequeños.

La construcción del edificio comenzó antes de la Guerra Civil, y terminó tras concluir esta; este hecho se puso de manifiesto en la formalización de las dos fachadas, que son diferentes, lo que supone un cambio fundamental en la obra del arquitecto al pasar del racionalismo de preguerra en la calle Zurbarán a la búsqueda de una nueva arquitectura madrileña en la calle Almagro. La tipología de fachadas, de gran pureza y perfecta conjunción volumétrica de los paños macizos con las terrazas abiertas hacia la calle patios forjados, como decía el arquitecto , tuvo un enorme éxito, y se reprodujo infinidad de veces en Madrid durante las tres décadas siguientes.
Equipo redactor Arquitectura de Madrid Revisión y adaptación: Servicio Histórico, Fundación Arquitectura COAM