Casa Rumeu

La casa Rumeu tiene una forma hexagonal que proviene de la experiencia de la casa Julià, donde los arquitectos ya habían ensayado las geometrías no ortogonales. La envolvente de la casa Rumeu está construida completamente con piedra de Cadaqués, como la que ya habían utilizado para hacer el muro de contención de la casa Julià. Allí se dieron cuenta de que, en Cadaqués, los muros de piedra eran más baratos que los de ladrillo, y por eso decidieron construir toda esta casa con piedra autóctona. También había un motivo paisajístico mucho más importante, ya que pensaban que era adecuado reservar la arquitectura blanca para el centro de Cadaqués pero, en cambio, utilizar la piedra para las casas de los alrededores, puesto que salpicaban el paisaje sin llegar a constituir entidades urbanas. De este modo, utilizando la misma piedra que en los bancales y las terrazas del exterior, conseguían que la casa desapareciera, camuflada en el paisaje.

Uno de los elementos más destacables del proyecto es la estructura de madera que soporta la cubierta, de pendiente muy suave. La estructura está formada por un sistema de cerchas de madera que, en unos casos, están soportadas por los muros de piedra de la fachada y, en otros, por pilares de madera. El resultado es un entramado estructural visto que proporciona una gran vistosidad y plasticidad al proyecto. En el interior se han construido algunos muebles de obra aprovechando los desniveles, en consonancia con los bancales y las terrazas del exterior.
Xavier Llobet Ribeiro