Casa Ferró

Situada en un entorno muy comprometido con el paisaje y a pocos metros de la orilla del mar, el proyecto se resuelve en planta baja. La casa se organiza en torno al cuerpo principal de la sala de estar, el comedor, la cocina y el porche exterior; y se articula con las estancias de dormitorio, almacén o estudio, a través de patios exteriores envueltos por un muro continuo de cerramiento que da privacidad a la casa.

El autor recurre a técnicas novedosas en su búsqueda de una autosuficiencia energética completa y, para ello, optimiza los elementos que componen el edificio. Aprovecha así las energías y elementos del medio natural con la incorporación de elementos tecnológicos para la captación y transformación de las mismas. Introduce muros de carga de gran inercia térmica, combinados con zunchos de hormigón, que reciben bóvedas rebajadas de ladrillo hueco y permiten reducir al mínimo la utilización del acero estructural. La colocación estratégica de pequeños huecos exteriores permite aprovechar al máximo las corrientes de aire.  

Guillem Tomás