Concesionario de SEAT

Fernández-Albalat aborda el proyecto de este edificio comercial tras la brillante realización de la fábrica de Coca-Cola, en un emplazamiento próximo. Tanto en este caso como en el precedente, las referencias modernas son americanas y nórdicas. Mies y Jacobsen son citados con inteligencia. La hermosa solución de estructura metálica y cerramientos de aluminio y vidrio, utilizados expresivamente, dan como resultado una arquitectura funcionalmente eficaz, constructivamente ejemplar, y de presencia elegante. El edificio para el concesionario de SEAT se diseña con plena conciencia de su posición en la ciudad, asumiendo las nuevas necesidades modernas. El edificio con este uso, asomado a la vía rápida de acceso a la ciudad, aprovecha la ocasión para mostrarse como reclamo publicitario. La caja transparente en la que se dispone la exposición de vehículos ya es una respuesta conveniente a esta demanda, pero la pieza cilíndrica, totalmente transparente, situada en un extremo del edificio, fue diseñada para este fin. Este es un síntoma de madura modernidad en aquellos años. No sólo se utiliza con solvencia el lenguaje moderno, sino que se dan respuestas eficaces a nuevas situaciones perceptivas, impensables en un mundo ya definitivamente caduco. Fernando Agrasar