Apartamentos Scipio Flats DMS-I

Josep Ferrer Bosch proyecta en 1962 los apartamentos Scipio Flats DMS-I para una agrupación de promotores extranjeros. El patrón habitual de estas unidades residenciales, con una disposición en batería de la unidad elemental, se modifica para adaptarse a las condiciones específicas de la parcela agrícola. El parcelario vinculado a la carretera de la costa, que recorre tres municipios –Cambrils, Salou y Vilaseca– lo conforman parcelas que tienen una proporción rectangular, con el lado menor orientado al mar. La morfología del parcelario provoca una implantación en diagonal de las unidades residenciales para aprovechar tanto la orientación como las vistas al mar desde un desarrollo lineal como mecanismo de agregación.

El conjunto consta de doce apartamentos agrupados en cuatro lotes de planta baja y dos plantas piso. Ferrer Bosch propone un ritmo visual derivado del desplazamiento de la unidad elemental para procurar vistas al mar sin comprometer la privacidad entre las celdas. Cada vivienda cuenta con tres dormitorios, cocina, baño y comedor-estar abierto a una amplia terraza orientada a sudeste, con vistas al mar. El acceso a las viviendas se hace por escaleras situadas en la fachada trasera, orientada a noreste. Ferrer Bosch recurre a la abstracción con el lenguaje depurado y estricto reconocible del neoplasticismo. Según el autor, influido por sus viajes en la década de 1960 a países nórdicos y centroeuropeos. CAIT URV (Juan Fernando Ródenas, Manuel Ferrer, Guillermo Zuaznabar)