Abstract
Habitar la inspiración/construir EL mito: casas-taller de artistas en el periodo de entreguerras #resumen: La colaboración entre las vanguardias artísticas y la arquitectura a comienzos del siglo XX cristalizó en numerosas viviendas y espacios de trabajo para artistas. La investigación desvela la casa-taller como campo de pruebas del habitar moderno y lugar paradigmático de la asimilación del hombre común y el artista, se evita la catalogación, configurando una estructura argumentativa a partir de la suma de episodios. ‘Casa y taller’ presenta el taller mnemónico; el contenedor de lo exterior, el taller teatral y la casa de inventario a finales del siglo xix. El taller de Gustav Klimt, la teoría sobre cotidianeidad y trabajo y la casa-taller Nau-Roeser (1912) de Heinrich Tessenow presentan ‘el taller refugio’. Machines celibataires á habiter’ estudia la maison d’artiste (1923) de Theo van Doesburg y cornelis van Eesteren; la de Piet Mondrian en rué du Depart; van Doesburg (1930) y Arp-Taeuber (1927) en Meudon-val-Fleury; la casa-taller del ciego Lemordant (1928); o reconstruye el proyecto ‘ma maison’ de Le corbusier, entre otras. En ‘la casa del obrero / la casa del artista’ se estudian varios proyectos de Le Corbusier, la idea de la disolución de toda artisticidad en la actividad cotidiana a través de su pensamiento; su influencia en las casas-taller de Juan o’Gorman para Rivera/ Kahlo y otras; y en proyectos del argentino wladimiro Acosta. Los arquitectos y la sociedad, tras reconocerse bajo el mito del artista y de su casa-taller, salen renovados para proponer y construir sus propias moradas. La casa-taller se ofrece al habitante moderno
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