Abstract
Reconocer que la arquitectura industrial puede formar parte de nuestro sustrato cultural, y por ende, ser considerada bajo el distintivo de patrimonio, con la denominación de industrial, es una cuestión que todavía provoca controversia entre aquellos que razonan que nació marcada por una raigambre laboral, en donde no se mantienen los preceptos de genialidad, creatividad y estética fijados por las anquilosadas normas que la costumbre, y la historicidad, aceptarían para elevar la obra de arte a la idealización del monumento.
Por el contrario, es cada vez mayor el interés que estas cuestiones están suscitando entre aquellos que consideran que su vertiente arquitectónica es el testimonio de una época determinada histórica, económica, social y laboralmente. Paralelamente surgen proyectos para recuperarla como un activo cultural y turístico, cuestiones que han nacido asociadas al patrimonio industrial. Un patrimonio con una entidad propia, que ha sido avalado por las nuevas actuaciones culturales, y que desde finales del siglo XX viene luchando por alcanzar en nuestro país el grado de reconocimiento que se merece.
Esta tesis doctoral tiene por cometido proceder al estudio de los espacios industriales derivados de los sectores industriales más característicos de la Región de Murcia, y analizar las pautas que se han seguido para convertir parte de los mismos en referentes de su patrimonio industrial, así como aportar otras medidas que se podrían tener en consideración para proceder a su reconocimiento. Aunque no lo hace de una forma aislada, sino tomando como referentes los ámbitos nacional e internacional, lo que ha servido para resaltar las características comunes que los relaciona y los separa.
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