El Cabildo de Gran Canaria ha decidido incoar el expediente de declaración BIC, con categoría de sitio histórico, el espacio del Hotel Oasis, de Maspalomas. La incoación no sólo afecta al Hotel Oasis sino a un área mayor que incluye otros edificios y se basa en un argumento histórico: el de que allí fue donde desembarcó en 1502 en Gran Canaria Cristóbal Colón para aprovisionarse en su cuarto viaje a América. Si bien el edificio no queda protegido por sus valores arquitectónicos, cualquier intervención en el mismo deberá ser aprobada por la Comisión de Patrimonio del Cabildo. |
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El Cabildo de Gran Canaria ha decidido incoar el expediente de declaración BIC, con categoría de sitio histórico, el espacio del Hotel Oasis, de Maspalomas. La incoación no sólo afecta al Hotel Oasis sino a un área mayor que incluye otros edificios y se basa en un argumento histórico: el de que allí fue donde desembarcó en 1502 en Gran Canaria Cristóbal Colón para aprovisionarse en su cuarto viaje a América. Si bien el edificio no queda protegido por sus valores arquitectónicos, cualquier intervención en el mismo deberá ser aprobada por la Comisión de Patrimonio del Cabildo. |
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El Cabildo de Gran Canaria ha decidido incoar el expediente de declaración BIC, con categoría de sitio histórico, el espacio del Hotel Oasis, de Maspalomas. La incoación no sólo afecta al Hotel Oasis sino a un área mayor que incluye otros edificios y se basa en un argumento histórico: el de que allí fue donde desembarcó en 1502 en Gran Canaria Cristóbal Colón para aprovisionarse en su cuarto viaje a América. Si bien el edificio no queda protegido por sus valores arquitectónicos, cualquier intervención en el mismo deberá ser aprobada por la Comisión de Patrimonio del Cabildo.
Esta decisión suspende la licencia de derribo concedida por el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana del hotel que proyectaron José Antonio Corrales, Ramón Vázquez Molezún y Manuel de la Peña Suárez entre 1965 y 1971, y que está incluido en el Registro DOCOMOMO Ibérico. La Fundación, al igual que otras entidades de prestigio como la Real Academia de San Fernando o la Fundación Cesár Manrique, habían solicitado del Cabildo la protección del edificio.