Edificio Última Hora

La construcción del paseo Mallorca, fruto de una de las reformas del Plan Alomar, se llevó a cabo en la zona que limita con el casco antiguo; y se aplicaron criterios estilísticos similares a los de la avenida Jaime III, de la que se continuó la acera porticada. Por tanto, buena parte de esta calle es una muestra de la aplicación epidérmica de elementos del regionalismo superpuestos a nuevos tipos estructurales y residenciales.

El edificio Última Hora destaca sutilmente en el contexto de fachada continua con una propuesta innovadora. La fachada mantiene en las plantas superiores la configuración basada en el efecto de las persianas correderas que protegen las terrazas longitudinales; se responde así, plenamente, a la organización de la planta en un juego cambiante de sombras que remite a la obra que José Antonio Coderch realizaba en Barcelona en la misma época. En el interior de los pórticos, la fachada de la planta baja y de los pisos de oficinas, libre ya de la carga representativa exigida, pone de manifiesto la estructura metálica, que enmarca el dibujo de una carpintería planteada con un sistema compositivo con leyes propias.
Gabriela Kacelnik