Dos casas dobles para Roberto Deprit

En el conjunto de casas de vecindad proyectadas por Tomás Bilbao durante la década de 1930, destaca la expresividad de este grupo de viviendas destinadas a la burguesía bilbaína. Cada planta consta de cuatro viviendas, cuya pieza más llamativa es el hall por cuanto, sin llegar a ser un vestíbulo de acceso, es un gran espacio central en torno al cual se distribuye el hogar. Su superficie es similar o superior a la de las habitaciones más importantes, siendo su uso ambiguo puesto que su amplitud permite utilizarlo, además de distribuidor, como sala de estar. No obstante, y en contradicción con su aparente importancia, es completamente interior y no recibe luz exterior directa. En cualquier caso, esta pieza es una interesante reflexión de Tomás Bilbao en torno a los espacios de distribución de la casa burguesa del ensanche. Su preocupación por mejorar su aprovechamiento le conduce a plantear soluciones alternativas de este tipo.

La manifestación exterior de las viviendas se confía a un plano de enfoscado blanco, de elegantes y cuidadas proporciones, inspirado en la estética del Movimiento Moderno. La composición es simétrica respecto al eje central de la parcela. Lo más llamativo es que la fachada se curva ligeramente sobre este eje para conseguir un expresivo plano plegado, concebido bajo las condiciones perceptivas de las estrechas calles del ensanche.
Asier Santas Torres