Clube de Ténis de Monsanto

La instalación se integra en el plan concebido por Keil do Amaral a partir de 1938 con vistas a la creación de un parque forestal en la sierra de Monsanto. Con una superficie de cerca de novecientas hectáreas, el parque era el resultado de la reforestación de esa sierra árida, animada por la implantación de varios equipamientos, y constituyó una de las novedades urbanísticas de la política de Duarte Pacheco. Programáticamente innovador, el club de tenis confirma la búsqueda de una tercera vía en el momento en que todavía se mantenía el lenguaje historicista y de corte clásico de representación del Régimen y se esbozaba ya la vuelta a una vanguardia de carácter internacional. La búsqueda de Keil de un puente entre la tradición y la modernidad se percibe en esta obra atenta a los valores del emplazamiento y sensible a la topografía, preocupaciones reflejadas en el modo en que se trabajan las plataformas o en la forma de explorar los magníficos puntos de vista sobre el estuario del río Tajo, premisas que desarrollará en el marco de su intervención como arquitecto de los espacios verdes de la ciudad. […] Ana Tostões