Central Térmica de Burceña

Hurtado de Saracho es un arquitecto titulado en la posguerra, que jugó un papel decisivo en la superación del racionalismo no ortodoxo, para ir a su esencia y su depuración, aproximándose así a la vanguardia internacional.

En la Central de Burceña la modernidad se revela sobre todo en el esfuerzo de desmaterialización de las fachadas. Este efecto se logra gracias a la disposición de franjas continuas de ventanas verticales y horizontales enrasadas, en un esfuerzo de dar cumplida respuesta a las exigencias de funcionalidad de la central. La racionalidad se evidencia también en la pureza geométrica del edificio, al servicio de la precisión técnica, en la textura y cromatismo conseguidos con la utilización del ladrillo “estela” rojo y las ventanas de vidrio “primalit” blancas, y en el modo de articular la composición del edificio con el contraste de líneas horizontales y verticales.
Gorka Pérez de la Peña Oleaga