Escola Francesa

La Escuela Francesa de Oporto, implantada en una superficie total de 21.800 metros cuadrados, integra varias áreas: el jardín de infancia, los servicios administrativos, el salón de actos y el gimnasio, la sección masculina y la sección femenina.

Subordinada a la topografía de un terreno caracterizado por la presencia de un vasto arbolado, la implantación de la escuela respetó además la relación con la calle existente. Con el propósito de definir el espacio exterior de recepción se prolongó el volumen de los servicios administrativos para que no sólo constituyese el elemento delineador de ese espacio, sino también un punto de atención desde la perspectiva de los transeúntes que utilizan la calle. En una de las piedras de la esquina de este cuerpo, se grabó en hormigón moldeado el nombre de la escuela. En el interior, la organización es bastante sencilla: en la planta de acceso, al norte, está ubicado el gimnasio, y al sur la escuela infantil con aulas y salas de juego. En el nivel situado debajo de la planta de acceso se hallan las instalaciones sanitarias y las salas de juegos y otros actos festivos. En la planta superior se distribuyeron las salas destinadas a los servicios administrativos, así como una pequeña biblioteca. Las restantes salas se abren a una terraza ajardinada construida sobre la cubierta de la escuela infantil. Las paredes exteriores son de granito y están revestidas de ladrillo. Los pavimentos elevados se construyeron con losas de hormigón. Los pavimentos interiores de las distintas plantas son de tarima y mosaico cerámico.
Sandra Vaz Costa